Suspiros. Porque tal vez, es la única acción que realizo cada vez que algo me pasa. No reacciono ni bien ni mal, ni sé realmente como debo reaccionar, solo suspiro.
Muchas veces me pregunto ¿Qué hice?
Tal vez cometí errores garrafales en mi vida y no me di cuenta a tiempo, y hoy los estoy pagando caro, viviendo, quizás, mi peor infierno.
Es difícil convivir de esta manera, no poder decirle a tu alrededor: No puedo más, tirar la toalla literalmente y mandar "todo a la mierda".
Pero aquí estoy, sobreviviendo a estas emociones, que me están atormentando cada noche.
Quiero correr, quiero gritar, llorar no, ya lo hice, quiero hacer tantas cosas; poder meter mi mano en mi cuerpo y rasgar cada dolor que llevo y quemarlo para que no vuelva a mi.
En estos momentos solo miro hacia el techo de mi habitación, contando las horas para que los medicamentos me vuelvan a dopar, como todas las noches; sentirme en otra dimensión y olvidar esta mierda de vida que llevo, y esperar el nuevo día, gris y abrumador, tratando de sonreír y mantener el cinismo de todo esta bien, para encajar socialmente.
Muchas veces espero que los medicamentos me lleven, y no despertar sabiendo que mañana será otro día.
Hace mucho (creo) que no escribía, era hora, ya es el momento. He vuelto y espero no desaparecer.
