martes, 5 de agosto de 2014

#52

Tanta gente, tan apresurada, acalorada y sin mirarse el uno al otro. Aquella escena de tanto movimiento, se contradecía con mi calma y el frío que estaba sintiendo en esos momentos sentada en la cafetería que me habías pedido que fuera en aquella mañana de Lunes.
Me citaste a las 10.00 en punto, ya eran las 10.10 y supuse que debía pedir otro café para esperarte. No sabía porqué te esperaba, pero aquel mensaje de anoche, me había dejado intrigada.

En la cafetería de la esquina, a las 10 de la mañana. Es necesario que estés ahí. Nos vemos

Tal vez, por eso no me iba. La última vez que nos vimos, fue extraña la sensación de que no nos íbamos a ver más, si seguimos hablando, pero ya no era lo mismo.
10.20 y aún nada. Puede ser que te habías confundido de persona, y si, me había ilusionado. Como siempre.

Pagué la cuenta, tomé mi bolso y decidí salir. Al momento, alguien me tomó por el brazo.

Disculpa, me demoré, había tenido un problema con la locomoción, pero aquí estoy. Me encanta volver a ver esa mirada tuya

A mi también me daba gusto verte. Un café más, pero contigo era lo que esperaba.


Cuanto tiempo. Pero aquí estoy, extrañaba escribir y decidí volver a esta hermosa creación. Tal vez no esté todos los días, pero estaré siempre dejando una huella. Estoy en una etapa, en donde estoy a punto de dar el paso más importante de mi vida. Terminé mi carrera universitaria y próximamente tendré mi ceremonia de titulación.
Pronto estaré dando más detalles de muchas sorpresas que tengo para todos. Un beso